Índice ─ Introducción y enlace al audio ─ Versión en español ─ Versión en inglés
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Introducción
─ Enlace al audio: en ivoox // enlace descarga
La lectura de estos mensajes dura en el audio hasta el minuto 16:18, y luego hay comentarios.
Esta vez vemos los siguientes dos mensajes, que son de Ann Rollins y de Jesús.
En los comentarios hemos repasado algún «dato nuevo», que aparece hoy (muy básico, sobre el concepto de «ángeles»)… «nuevo» respecto a lo que hemos visto antes en los mensajes…, aunque, por supuesto, lo más importante no es este tema de «los datos».
Para ver la lista con todos los enlaces a los textos y audios ver:
Forma parte de un libro que es el segundo volumen de una recopilación concreta de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, de Jesús de Nazaret.
Estos volúmenes fueron preparados y/o compartidos así por Divine Truth, entre otras personas.
Este segundo volumen no estructura los mensajes según temas. Y tal como se ve en su índice, contiene:
─ Una introducción;
─ Una nota breve sobre la edición digital;
─ La lista de mensajes,
─ y un breve apartado final, donde sólo se presenta de nuevo la oración que podemos llamar «del amor divino», y que vimos en el primer volumen.
Versión en español
La experiencia de Ann Rollins en la segunda Esfera Celestial. Ha superado la segunda muerte (8 julio 1915)
Estoy aquí, tu abuela.
Quiero contarte esta noche mi experiencia en mi nuevo hogar, entre los espíritus redimidos que han entrado en ese Reino.
En las enseñanzas de la verdad divina,
fue muy intuitivo, y útil
(aunque el tema de los conceptos mentales siempre es resbaladizo)
ver el concepto de voluntad como:
«condición actual de alma» * .
El deseo sería lo que de alguna manera «tira» de esa condición.
En torno al deseo…:
─ el deseo sería lo que deberíamos cultivar (su purificación),
─ tocaría darnos cuenta, sentir sinceramente, qué deseos tenemos (si ayudan o no a sanar esa condición de alma… a hacerla progresar),
─ tocaría darnos cuenta de cuán armónicos son los deseos con la verdad y el amor;
─ normalmente muchos deseos son impuros,
─ y por lo tanto, con esos deseos, tiramos ambiguamente del alma hacia «arriba»… hacia «abajo»… (en su condición en amor y verdad).
Estamos condicionados:
─ por las heridas del alma (con nuestro mucho o poco carácter para afrontar sinceramente el crecimiento y la sanación),
─ y por la influencia mala o buena (o así como «neutra», digamos), no solamente del entorno físico y sus habitantes y procesos,
─ sino también de los desencarnados ─una influencia que se daría continuamente─.
Los deseos en último término también serían parte del alma, del «ánimo»;
sin embargo,
serían aquello que dirige o impulsa, para un lado o para otro, digamos, esa condición actual del alma.
«Deseo» sería a veces casi sinónimo de «fe», según se mire
(en un sentido más amplio de «fe», no sólo en el relacionado con el anhelo dirigido hacia Dios ─que sería el uso más propio, digamos, quizá, de «fe»─).
La fe sería deseo efectivo, y de alguna manera basado en la verdad, digamos.
Un ejemplo de «fe corrupta» es la siguiente creencia falsa, y las emociones que la acompañen:
«Jesús es Dios».
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* Y somos el alma que aviva tanto nuestro cuerpo espíritu como el cuerpo físico;
en cuanto al cuerpo espíritu: creo que se confundiría todo un poco, al usar el tema de «el doble»;
al hablar de «el doble» supongo que pueden caber las influencias de otros desencarnados, que se hacen entonces indiscernibles.
Habría más gente desencarnada merodeando por la Tierra que encarnados,
y, por cierto, algunos de los que merodean están durmiendo en la otra punta del planeta, por ejemplo…
y otros simplemente son ya sólo desencarnados ─»muertos», pues nadie «muere»─
(y todos «semi – desencarnamos» por la noche, como tanta gente ya sabrá).
Forma parte de un libro que es el primer volumen de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, Jesús de Nazaret.
Estos volúmenes fueron preparados o compartidos así por Divine Truth (entre otras personas).
El primer volumen incluye los siguientes temas y apartados (los 11 temas numerados sirven para organizar temáticamente los mensajes):
a) ─ Retrato de James E. Padgett
b) ─ Mi testimonio (por Leslie R. Stone)
c) ─ Foto espiritual de Mary Kennedy con su alma gemela, el Dr. Stone.
d) ─ La verdadera misión de Jesús
I. Jesús y su relación con Dios.
II. Dios y el alma humana.
III. El problema del pecado.
IV. Redención del pecado.
─ 1. Los mensajes
─ 2. Ámbitos celestiales
La oración
─ 3. Inmortalidad
─ 4. ¿Quién y qué es Dios?
─ 5. Espíritu Santo
─ 6. Resurrección
─ 7. El alma
─ 8. Perdón
─ 9. Expiación [estamos aquí: Vemos los 7 últimos mensajes en este apartado 9]
─ 10. Infierno
─ 11. Expiación vicaria
e) ─ Mensajes adicionales
Versión en español
9. La expiación (cont.)
Constantino dice que cuando estaba en la Tierra nunca aceptó el cristianismo. Ahora es un espíritu celestial (Constantino – Emperador romano) (5 septiembre 1916)
Vemos los siguientes dos mensajes contenidos en el tema 9.
El tema general es la expiación («atonement»), aunque en estos mensajes se tratan diversas cosas. En Divine Truth se nos aclara que el segundo de los mensajes que aquí vemos es también del mismo Riddle, aunque el mensaje se presente como anónimo, firmado por «G» ─anónimo, pues, por motivos que desconozco─.
Para ver la lista con todos los enlaces a los textos y audios ver:
Forma parte de un libro que es el primer volumen de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, Jesús de Nazaret.
Estos volúmenes fueron preparados o compartidos así por Divine Truth (entre otras personas).
El primer volumen incluye los siguientes temas y apartados (los 11 temas numerados sirven para organizar temáticamente los mensajes):
a) ─ Retrato de James E. Padgett
b) ─ Mi testimonio (por Leslie R. Stone)
c) ─ Foto espiritual de Mary Kennedy con su alma gemela, el Dr. Stone.
d) ─ La verdadera misión de Jesús
I. Jesús y su relación con Dios.
II. Dios y el alma humana.
III. El problema del pecado.
IV. Redención del pecado.
─ 1. Los mensajes
─ 2. Ámbitos celestiales
La oración
─ 3. Inmortalidad
─ 4. ¿Quién y qué es Dios?
─ 5. Espíritu Santo
─ 6. Resurrección
─ 7. El alma
─ 8. Perdón
─ 9. Expiación [estamos aquí: Vemos los dos siguientes mensajes en este apartado 9]
─ 10. Infierno
─ 11. Expiación vicaria
e) ─ Mensajes adicionales
Versión en español
9. La expiación (cont.)
El Cielo es un lugar y también una condición del alma (A. G. Riddle – Espíritu Celestial) (27 febrero 1920)
Está en el apartado de esa página dedicado a Robert J. Lees (buscar «Robert» en esa página).
Para los audios:
En esa misma página estarán enlazados y ordenados los audios. Y, como en otros audios, hice un comentario al final de este, tras la lectura del texto. En el comentario vemos algunas ideas importantes y a veces aclaramos algunas cosas.
Reuniré todos los textos de este tercer libro de la trilogía de R. J. Lees (La vida elísea) cuando vaya terminando de hacer esta «primera» versión de la traducción (que hago con ayuda de deepl, google, wordreference…) ─»primera» versión en el sentido de «para mi web»─.
Notas al capítulo
─ Ver el audio correspondiente.
─ Utiliza la palabra «dimensión», aquí, de manera peculiar, digamos. No hemos de confundirlo, aunque tenga que ver, con el tema de las esferas concretas, vistas «en el mundo espiritual», donde nuestra alma va progresando desde este estado «caído».
─ Cuando habla del espacio como «dos dimensiones» podríamos por ejemplo entender que está hablando de dos cosas: espacio y tiempo, y por eso dice que son dos dimensiones del «espacio»: Tenemos la experiencia de esas cualidades que llamamos «espacio» (donde habitamos como cuerpo físico o como cuerpo espíritu) y «tiempo» (la experiencia interna en el mundo físico y en el mundo espiritual). Y esas experiencias de espacio y tiempo («dos dimensiones») las tenemos tanto en el mundo físico como en nuestra vivencia en el mundo espiritual.
─ De ahí quizá que él aprovecha para dar entidad a eso, considerándolos como «otras dimensiones», pues luego llama a lo físico «tercera» y a lo espiritual «cuarta».
─ En realidad, tratar como dimensión a lo espiritual tendría un sentido fundamental que no se refiere al «mundo espiritual» directamente; es decir, no se refiere en concreto a la experiencia en «otras dimensiones» ─la experiencia del mundo de las esferas espirituales donde viviremos más con el cuerpo espíritu en el futuro─.
─ Con «dimensión», en este caso, se referiría a la dimensión de los «valores», o sea, los principios y leyes «espirituales». Eso sería el «ámbito o reino del espíritu».
─ Nuestro progreso, en esa «dimensión espiritual» ─nuestro progreso como almas─, nos habilita para estar en más esferas del mundo «espiritual» (en un cierto «otro sentido» de «espiritual»).
─ También vemos que al hablar de dimensión expone la faceta de «interrelación», de comunicar efectivamente entre ámbitos. La dimensionalidad tendría que ver con esa capacidad, en su despliegue. La consciencia, como cualidad a desarrollar durante el progreso del alma, va desarrollando o desplegando grados en ese sentido «dimensional».
Versión en español
Capítulo 2
El ojo de la fe
«Mi recién encontrado yo» expresa significativamente mi condición y perspectiva en el momento en que Vaone me dejó. En la revelación que Jesucristo hizo a Juan en Patmos, Aquel que estaba sentado en el trono y al que se oye declarar ‘Miren: Yo hago nuevas todas las cosas’ (Ap. 21:5); y Pablo, escribiendo a los Corintios, nos asegura que ‘si alguien está en Cristo, ya es nueva criatura‘ (2 Corintios 5:17); pero la nebulosa incertidumbre que existe en cuanto a cuándo ha de alcanzarse la realización de esta condición, unida al íntimo conocimiento de mis propias imperfecciones, me impide aventurarme a esperar que tal culminación haya sido hasta ahora alcanzada siquiera aproximadamente en mi propio caso. Continuar leyendo «La puerta del Cielo | Capítulo 2: El ojo de la fe»
Índice ─ Introducción ─ Enlaces al audio ─ Texto del esquema de la sesión ─ Texto del esquema de preguntas * Sentirse terrible cuando le pedimos a Dios la verdad sobre nuestro pecado * Experimentar y cometer errores con nuestra comprensión del Amor * Razones para el autocastigo * Cómo sé bajo qué tipo de influencia espiritual estoy * Por qué sentimos emociones en público pero no en privado * Qué es el espíritu santo * Qué es la oración * Cuando estoy entregando mi voluntad en comparación con solo querer la Verdad * La ira surge de las exigencias y expectativas * Cómo amar a una persona que tiene miedo sin consentir a su miedo * Usar la argumentación intelectual para tapar el enojo
─ Versión en inglés del esquema de la sesión ─ Versión en inglés del esquema de las preguntas
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Introducción
Vemos en audio y en texto el siguiente esquema del grupo organizado por Jesús y María Magdalena en el 2016, sobre «Desarrollar la voluntad de amar«. Es el relativo a la sesión sobre: «Mi voluntad de amar«.
También añado el esquema de preguntas de la sesión correspondiente (la del grupo de marzo del 2016).
En el audio también he leído y comentado el esquema de las preguntas y respuestas. La parte quizá más interesante de todo el audio sería la del principio de esa lectura de las preguntas y respuestas, pues son relativas al autocastigo que todos aprendemos a hacernos en la infancia, etc., y sobre el cual tenemos mucho por sentir (ya que parece que muy a menudo estamos muy bloqueados en ciertos «no quiero» ─»no quiero’s» que no queremos sentir humildemente─).
Los demás materiales se pueden ver enlazados y ordenados en la página dedicada a estos materiales del 2016 y del 2019: unplandivino.net/2016-grupos/
Texto del esquema
Mi Voluntad de Amar
Introducción
Tres direcciones para hacer crecer la voluntad Ninguna acción:
El pecado permanece en mi alma.
Sigo viviendo en desarmonía con las Leyes amorosas de Dios. Acción en una dirección negativa:
Creo más pecado en mi alma.
Deseo vivir en desarmonía con todas las Leyes amorosas de Dios.
Me rebelo contra todas las Leyes amorosas de Dios. Acción en una dirección positiva:
Despierto al pecado y lo elimino.
Vivo en armonía con todas las Leyes amorosas de Dios. Desarrollar mi voluntad de amar es la ÚNICA MANERA de progresar
Como Jesús señaló, también es la única manera de alcanzar la felicidad o el verdadero placer. ¿Cómo he estado ‘haciendo crecer’ mi voluntad?
Si quiero ver un ejemplo de una voluntad de amar subdesarrollada, puedo observar mi vida en este momento (esto se aplica a la mayoría de las personas presentes).
Los grupos de asistencia para comprender el pecado y eliminar el pecado describirán esto en detalle. Continuar leyendo «Esquema de «Mi voluntad de amar» (más la sesión de preguntas – marzo 2016)»
Índice ─ Introducción ─ Enlaces al audio ─ Texto del esquema
─ Notas ───
Introducción
Vemos en audio y en texto el siguiente esquema del grupo organizado por Jesús y María Magdalena en el 2016, sobre «Desarrollar la voluntad de amar«. Es el relativo a la sesión sobre: «Comprender mi voluntad«.
Los demás materiales se pueden ver enlazados y ordenados en la página dedicada a estos materiales del 2016 y del 2019: unplandivino.net/2016-grupos/
Texto del esquema
Comprender mi voluntad
¿Qué es la voluntad?
El libre albedrío es el regalo que Dios ha dado a todas las personas
Este don ya ha sido dado a todo el mundo que haya existido alguna vez.
Mi voluntad es el desarrollo personal y el uso personal del don del libre albedrío
Dios me ha dado la oportunidad de desarrollar mi voluntad por muchas razones amorosas.
Para que pueda ser un individuo que actúa, piensa y siente libremente.
Para que no sea un ser robótico controlado externamente.
Me da el placer potencial de dar y recibir amor.
Me da la alegría potencial de crear en armonía con el amor.
Me da la posibilidad de relacionarme con los demás y con Dios.
He sido concebido sin voluntad, pero con el don del libre albedrío
Cuando nazco, ya estoy influenciado por la voluntad de los demás.
Dado que he sido influenciado, ya tengo partes de mi voluntad en armonía con el amor, y otras partes de mi voluntad en desarmonía con el amor.
Pero todavía tengo que aprender que la forma en que elijo usar mi voluntad es mi responsabilidad.
Todavía no entiendo que puedo desarrollar mi voluntad y usarla como yo quiera.
Estoy aprendiendo a desarrollar mi voluntad a través de mi experiencia y mis elecciones
Cambiar mi voluntad puede ser tan simple como tomar una decisión diferente basada en el alma.
Cambiar mi voluntad también puede ser muy complejo e implicar muchas emociones contrapuestas.
Sólo yo puedo cambiar mi voluntad, pero puedo ser influenciado fácilmente.
Mi voluntad se origina en el alma, es una cualidad cuya base es el alma
Proviene del alma y manda sobre mis pensamientos, palabras y acciones.
Es el verdadero deseo, pasión, aspiración, anhelo e intención del alma.
Es la decisión más obvia que tomo en base a mi condición.
Gobierna todas las elecciones y decisiones emocionales, incluso las basadas en el miedo.
Está influenciada por:
Pensamientos, creencias e ideas en armonía o en desarmonía con el amor.
Anhelos y deseos en armonía o en desarmonía con el amor.
Aspiraciones e intenciones en armonía o en desarmonía con el amor.
Emociones y sentimientos en armonía o en desarmonía con el amor.
Acciones realizadas en armonía o en desarmonía con el amor.
Fuentes externas de las mismas [de todo lo anterior] en armonía o en desarmonía con el amor.
Presiones externas en armonía o en desarmonía con el amor. Continuar leyendo «Esquema de «Comprender mi voluntad»»
Índice ─ Introducción ─ Enlaces al audio ─ Texto del esquema ───
Introducción
Vemos en audio y en texto el siguiente esquema del grupo organizado por Jesús y María Magdalena en el 2016, sobre «Desarrollar la voluntad de amar«. En la sesión de esa hora se trató de esa pregunta: «Afrontar mi resistencia a la fe«.
Los demás materiales se pueden ver enlazados en la página dedicada a estos materiales del 2016 y del 2019: unplandivino.net/2016-grupos/
Texto del esquema
Afrontar mi resistencia a la fe
Introducción ¿Soy un adulto o un pequeño bebé?
Los bebés se sientan y lloran porque alguien no los cuida.
Los bebés esperan que otros los alimenten y los cuiden.
¿Soy autocomplaciente, apático, o tengo pasión por el Amor? Continuar leyendo «Esquema de «Afrontar mi resistencia a la fe»»
Tenemos creencias falsas sobre las motivaciones.
Las vemos en este audio.
Con estas creencias nos impedimos «sanar» el alma.
Es decir, con esas creencias no podemos eliminar de verdad las causas de lo que degrada el alma, y que, como el alma es «causal», si seguimos sin darnos cuenta de esas creencias no podremos eliminar los efectos de esa degradación ─sus efectos en «nuestras» vidas─.
(La causa de la degradación es el pecado en general, es decir: el deseo de ignorancia, la falta de arrepentimiento y de perdón, creencias falsas sobre Dios, etc.).
Hoy vemos pues el esquema sobre «mis motivaciones para pecar», perteneciente a los encuentros realizados por Jesús y María Magdalena en 2019.
Enlace a la página donde archivo estos materiales sobre los encuentros del 2016 y el 2019:
─ unplandivino.net/2016-grupos/
Mis motivaciones crean todas mis creencias, ideas, comportamientos, intenciones, deseos, aspiraciones y objetivos
La motivación es mi incentivo interno, impulso o fuerza motriz, ímpetu, estímulo, inducción, aliciente, incentivo, racionalización, explicación, causa, necesidad, o la razón de mis pensamientos, palabras, acciones, emociones o comportamientos.
Todas las motivaciones, sean amorosas o no, en sí mismas, tienen como causas subyacentes, o son impulsadas y creadas por combinaciones de:
Mi moral
Mi moral es lo que emocionalmente creo que es correcto o justo.
Mis valores
Mis valores son lo que emocionalmente creo que es importante, agradable o bueno para mí o para los demás.
Mi fe
Mi fe es lo que emocionalmente creo que es verdad para MÍ ahora y en MI futuro, e impulsa lo que aspiro o deseo: ser, creer (es o será posible para mi futuro), hacer o esperar
Corrupción
Dios creó el alma perfecta sin desarrollo moral y sin corrupción.
Para elegir el pecado, debe existir dentro de mí algún nivel de corrupción
2.1. 2.1. Qué es la corrupción
Corrupción es deshonestidad, vicio, depravación moral, maldad, manipulación, degeneración, iniquidad, malevolencia, decadencia, libertinaje, envilecimiento.
La moral, los valores y la fe corruptos son creaciones humanas.
2.2. Cómo se desarrolla la corrupción
El desarrollo se produce a medida que el ser humano elige libremente, acepta influencias, tiene experiencias y crece.
El alma humana posee un número casi infinito de atributos y características que pueden desarrollarse con o sin amor.
La corrupción transforma el alma de su estado natural de inocencia y perfección, tal como Dios la creó, a un estado de imperfección, eliminando las influencias amorosas, sinceras y morales, y añadiendo influencias desamorosas, falsas e inmorales.
La corrupción comienza al absorber los valores, la moralidad y la fe de los padres y de otros en el entorno, pero continúa cuando el individuo fomenta un mayor desarrollo y más deseos de falsedad, desamor e inmoralidad.
Diagrama que aparece en este esquema del 2019. El pie del diagrama dice que la fe gobierna «las morales» y los valores. Y que la fe pura puede dominar valores corruptos y morales corruptas
3. Mi motivación para pecar
Dado que la moral, los valores y la fe impulsan las motivaciones, mi motivación para pecar debe necesariamente ser algo que está impulsado por:
Mi moral corrupta
Lo que emocionalmente creo que es correcto o justo, pero en realidad es incorrecto o injusto desde la perspectiva de Dios.
Mis valores corruptos
Lo que emocionalmente creo que es importante, agradable o bueno para mí, pero que no es importante, crea dolor para otros o para mí mismo, o es malo para mí, y no tiene valor desde la perspectiva de Dios.
Mi fe corrupta
Lo que emocionalmente creo que es verdad para MÍ ahora y en MI futuro, que es defectuoso, está en desamor, es falso, y es irreal o falso desde la Perspectiva de Dios Continuar leyendo «Esquema sobre «mis motivaciones para pecar»»
Captura de un momento en que Rubén entra en una residencia de ancianos inundada. Es del vídeo en directo hecho por Rubén el día 31 de octubre del 2024, un día después de la inundación por la DANA en poblaciones valencianas y españolas
Al hilo de lo que estamos viendo últimamente por ejemplo en «Desmitificando de nuevo la fe«: unplandivino.net/desmitificando-de-nuevo-la-fe/,
… podemos ver un caso concreto de persona que hace declaraciones de fe muy nítidas: Rubén Gisbert, que precisamente ha sido masivamente difamado a finales de este año 2024, pues, como sabemos, en el mundo estamos básicamente en emociones contrarias a la verdad (en miedo y en las creencias asociadas al miedo), y el error lucha contra la verdad «como gato panzarriba», dentro de nosotros.
Rubén hace declaraciones de fe muy manifiestas, independientemente de lo «pura» o impura que esta fe pueda ser.
La fe no es algo religioso. La fe es la actitud de algo así como una fidelidad a «la verdad interna», que también muestran los científicos, pues la fe se basa en hechos, aunque sean hechos de la certeza sentida internamente (lo que tradicionalmente se llama «conciencia», que es la voz de los sentimientos de la conciencia ─no «consciencia» con ese, sino «conciencia»─).
La fe es como una fidelidad a algo que sabemos que es verdad ahora, y que es algo que deseamos sinceramente para nosotros que sea verdad ahora y en el futuro.
La fe puede estar más o menos impura, en cuanto a que lo que cultiva esa fe sea más o menos fiel a la verdad… pero el fenómeno es el mismo.
La declaración que Rubén Gisbert hace a menudo, es la de «hacer lo que siente que debe hacer», una declaración de lealtad, para poder «morir tranquilo», pudiendo entonces mirar atrás sintiendo cierta paz en ese día de la muerte ─y en general poder mirarse al espejo en el presente, todos los días─.
Y Rubén claramente expresa, por cierto, que ni siquiera cree en la vida más allá de la muerte, y, por tanto, mucho menos «cree en Dios», aunque él y muchas personas asocian de manera irracional y extraña ambas cosas, es decir: la vida tras la muerte, y Dios ─como si fueran indisociables─).
Pero el tema no es ese, porque insistamos, la fe no es algo religioso.
Rubén lo expresa a menudo usando la palabra «deber», en relación a esa especie de «llamada interna» que todo el mundo de algún modo sentimos, y que tiene que ver con un cierto «ser fieles a la verdad y a uno mismo».
Rubén da uno de los mejores ejemplos que he visto nunca de declaración de fe.
Quizá ese tipo concreto de expresión le viene de familia (la expresión del «deber»), y, por cierto, quizá en su familia él tuvo una experiencia algo mejor que la promedio, en cuanto a que su padre y/o su madre puede que fueran más «éticos» que el promedio, en el sentido de que «mantuvieran su palabra» con él, aunque él «sólo fuera un niño».
Esto de ser coherentes con los niños no suele pasar a menudo, por lo que parece, ya que de pequeños todos somos traicionados casi todo el rato con displicencia condescendiente.
Es decir, por ejemplo no se cumplen las promesas hechas a los niños. Con ellos se justifica ser incoherentes. Incoherentes por ejemplo en la enseñanza de lo que se llama «valores», una enseñanza esta que suele ser «inconsciente» y que en general creo que todavía no se tiene como algo realmente importante o primordial, y que ─digamos─ es dada «por el ejemplo», un ejemplo que muchas veces es malo ─es decir, está en desarmonía con la verdad y con el amor─.