1/11:47-48) 11. La expiación vicaria (Jesús y Juan escriben) | El verdadero evangelio – Revelado de nuevo por Jesús | Vol. 1. / 11:47-48

Índice
─ Introducción y enlace al audio
─ Versión en español
─ Versión en inglés 

___

Introducción

─ Enlace al audio: en ivoox // enlace descarga
La lectura de estos mensajes dura en el audio hasta el minuto 19:33, y luego hay comentarios. Esta vez los mensajes también hacen una alusión directa al tema de este apartado 11 ─que agrupa mensajes muy variados─.

Vemos dos mensajes, uno de Jesús y otro de Juan. Jesús habla, por ejemplo, del grave problema que fue y que es hoy el error que se transmite en gran parte del «cristianismo», tal como conocemos esta religión en sus variantes: El error de «endiosar» a Jesús. Juan habla, por ejemplo, de la importancia de no subestimar la ayuda que los espíritus en malas condiciones pueden dar a otros que están en peores condiciones aún.

A continuación, pues, vamos a ver parte del apartado:

11) La expiación vicaria

Se trata de los siguientes dos mensajes contenidos en este apartado.

El tema principal en el apartado es «la expiación vicaria», ya que es una creencia o dogma muy dañino.

Para ver la lista con todos los enlaces a los textos y audios ver:

unplandivino.net/padgett/

Forma parte de un libro que es el primer volumen de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, Jesús de Nazaret.

Estos volúmenes fueron preparados o compartidos así por Divine Truth entre otras personas.

El primer volumen incluye los siguientes temas y apartados (los 11 temas numerados sirven para organizar temáticamente los mensajes):

a) ─ Retrato de James E. Padgett
b) ─ Mi testimonio (por Leslie R. Stone)
c) ─ Foto espiritual de Mary Kennedy con su alma gemela, el Dr. Stone.

           d) ─ La verdadera misión de Jesús

I. Jesús y su relación con Dios.
II. Dios y el alma humana.
III. El problema del pecado.
IV. Redención del pecado.

─ 1. Los mensajes
─ 2. Ámbitos celestiales
La oración
─ 3. Inmortalidad
─ 4. ¿Quién y qué es Dios?
─ 5. Espíritu Santo
─ 6. Resurrección
─ 7. El alma
─ 8. Perdón
─ 9. Expiación
─ 10. Infierno
─ 11. Expiación vicaria [estamos aquí: Vemos los dos siguientes mensajes en este apartado 11]
e) ─ Mensajes adicionales

Versión en español
11. La expiación vicaria (cont.)

Jesús no es Dios ni debe ser adorado como Dios. Explica su misión. Estos mensajes que el Sr. Padgett está recibiendo son «su nuevo evangelio para todos los hombres, tanto mortales como espíritus» (Jesús) (24 enero 1915)

Estoy aquí, Jesús.

Ahora estás en condiciones, y te daré un breve mensaje. Cuando estuve en la tierra no fui adorado como Dios, sino considerado simplemente como el hijo de Dios, en el sentido de que en mí se impusieron las verdades de mi Padre y muchos de Sus maravillosos y misteriosos poderes. No me proclamé Dios, ni permití que ninguno de mis discípulos creyera que yo era Dios, sino solo que era Su hijo amado, enviado para proclamar a la humanidad Sus verdades y mostrarle el camino hacia el Amor del Padre. No era diferente de los demás hombres, excepto que poseía, hasta cierto punto, este Amor de Dios, que me liberó del pecado e impidió que los males [evils] que formaban parte de la naturaleza humana se convirtieran en parte de la mía. Nadie que crea que soy Dios conoce la verdad ni obedece los mandamientos de Dios al adorarme. Tales adoradores blasfeman y perjudican gravemente la causa de Dios y mis enseñanzas. Muchos hombres se habrían convertido en verdaderos creyentes y adoradores del Padre, y seguidores de mis enseñanzas, si este dogma blasfemo no se hubiera interpolado en la Biblia. No fue con mi autoridad ni a consecuencia de mis enseñanzas que se promulgó o creyó en una doctrina tan perjudicial. Continuar leyendo «1/11:47-48) 11. La expiación vicaria (Jesús y Juan escriben) | El verdadero evangelio – Revelado de nuevo por Jesús | Vol. 1. / 11:47-48»

1/11:45-46) 11. La expiación vicaria (Jesús escribe: «cierre de los cielos»…) | El verdadero evangelio – Revelado de nuevo por Jesús | Vol. 1. / 11:45-46

Índice
─ Introducción y enlace al audio
─ Versión en español
─ Versión en inglés 

___

Introducción

─ Enlace al audio: en ivoox // enlace descarga
La lectura de estos mensajes dura en el audio hasta el minuto 15:08, y luego hay comentarios. Esta vez los mensajes también hacen una alusión directa al tema de este apartado 11 ─que agrupa mensajes muy variados─.

Vemos dos mensajes, de Jesús y de Helen. Jesús comenta cosas muy importantes, de nuevo sobre el tema principal y hechos como el «cierre de los cielos».

Así, al final, tras la lectura, vemos algunas cosas que parecen tener que ver con ese tema:
─ la singularidad tecnológica,
─ la moda en torno al «anticristo«, etc.

A continuación, pues, vamos a ver parte del apartado:

11) La expiación vicaria

Se trata de los siguientes dos mensajes contenidos en este apartado.

El tema principal en el apartado es «la expiación vicaria», ya que es una creencia o dogma muy dañino.

Para ver la lista con todos los enlaces a los textos y audios ver:

unplandivino.net/padgett/

Forma parte de un libro que es el primer volumen de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, Jesús de Nazaret.

Estos volúmenes fueron preparados o compartidos así por Divine Truth entre otras personas.

El primer volumen incluye los siguientes temas y apartados (los 11 temas numerados sirven para organizar temáticamente los mensajes):

a) ─ Retrato de James E. Padgett
b) ─ Mi testimonio (por Leslie R. Stone)
c) ─ Foto espiritual de Mary Kennedy con su alma gemela, el Dr. Stone.

           d) ─ La verdadera misión de Jesús

I. Jesús y su relación con Dios.
II. Dios y el alma humana.
III. El problema del pecado.
IV. Redención del pecado.

─ 1. Los mensajes
─ 2. Ámbitos celestiales
La oración
─ 3. Inmortalidad
─ 4. ¿Quién y qué es Dios?
─ 5. Espíritu Santo
─ 6. Resurrección
─ 7. El alma
─ 8. Perdón
─ 9. Expiación
─ 10. Infierno
─ 11. Expiación vicaria [estamos aquí: Vemos los dos siguientes mensajes en este apartado 11]
e) ─ Mensajes adicionales

Versión en español
11. La expiación vicaria (cont.)

Dios es un Dios de amor, y nadie puede acercarse a Él a menos que reciba el amor del Padre en su alma. Llegará el momento en que el privilegio de obtener el Amor Divino será retirado de la humanidad, y cuando ese gran acontecimiento ocurra, nunca más será restaurado (Jesús) (3 marzo 1915)

Estoy aquí, Jesús.

Esta noche estás en mejor condición y continuaré con mis mensajes.

«Dios es un Dios de amor, y nadie puede llegar a Él a menos que reciba el amor del Padre en su alma». Como los hombres son pecaminosos [sinful] por naturaleza e inclinados al error y a la violación de las leyes de Dios, solo pueden redimirse de ese pecado obteniendo este Amor; y éste solo se puede obtener mediante la oración y la fe en la disposición de Dios de otorgar este Amor a quien lo pida. No quiero decir que deban haber oraciones formales ni acatar ningún credo o dogma de la iglesia; mas la oración eficaz es la que emana del alma y de las sinceras aspiraciones del hombre. Que sepan, pues, que a menos que tengan un verdadero anhelo del alma por este Amor, no les será concedido; ningún deseo intelectual bastará. El intelecto no es la facultad del hombre que lo une a Dios. Solo el alma está hecha a semejanza del Padre, y a menos que esta semejanza se perfeccione llenándola con el Amor Divino del Padre, la semejanza nunca es completa.

El amor es lo más importante en la economía de Dios de la existencia real. Sin él, todo sería caos e infelicidad; pero donde existe, también existe armonía y felicidad. Digo esto porque sé por experiencia propia que es cierto. Que no piensen los hombres que Dios es un Dios que busca la adoración de los hombres mediante las meras facultades intelectuales; eso no es cierto. Su Amor [el de Dios] es lo único que puede unirlos a Dios. Este Amor no es el amor que forma parte de la existencia natural del hombre. El amor que tienen los hombres que no han recibido una parte del Amor Divino no es suficiente para aunarlos con el Padre; ni es ese amor el que les permitirá entrar en las Esferas Celestiales y convertirse en ángeles, llenos de este Amor Divino y que siempre hacen la voluntad del Padre. Este Amor sólo se encuentra en las almas de quienes lo han recibido mediante la ministración del Espíritu Santo, que es el único instrumento de las operaciones de Dios que es utilizado para lograr la salvación de los hombres.

He visto las obras del Espíritu en las almas de los hombres y sé que lo que os digo es verdad. Nadie debe confiar en que ningún otro instrumento o medio que no sea el Espíritu Santo le vaya a permitir obtener este Amor. No debe confiar en la idea de que, sin él, puede formar parte del Reino de Dios, pues ningún amor, salvo este Amor Divino, puede darle derecho y calificarlo para entrar en ese Reino.

Cuando estuve en la tierra, enseñé la doctrina de la salvación únicamente mediante las operaciones del Espíritu Santo, en el cumplimiento de los mandamientos del Padre. La mera creencia en mí o en mi nombre sin este Amor, jamás permitirá a nadie poseerlo. De ahí el dicho: «Todos los pecados contra mí, o incluso contra los mandamientos de Dios, pueden ser perdonados, pero el pecado contra el Espíritu Santo no les será perdonado, ni en la tierra ni en el mundo espiritual». Esto significa que mientras un hombre rechace las influencias del Espíritu, peca contra él, y tal pecado le impide recibir este Amor Divino; y, por lo tanto, en ese estado no puede ser perdonado ni se le permite entrar en el Reino Celestial del Padre.

El Amor de Dios no es el que necesita del amor del hombre para adquirir una Esencia Divina, sino que, por el contrario, es el amor del hombre el que, para alcanzar la Divinidad en su naturaleza, debe estar completamente envuelto o absorbido por el Amor Divino del Padre. Así pues, que el hombre sepa que su amor es solo una sombra de lo que es el Amor del Padre, y que mientras se niegue a recibir este Amor del Padre, se verá obligado a permanecer separado del Padre, y a disfrutar únicamente de la felicidad que su amor natural le brinda.

Estoy tan seguro de que todos los hombres pueden recibir este Amor, si tan solo lo buscan de la manera verdadera y con una fe y un deseo fervorosos [earnest desire and faith], que sé que es posible que todos los hombres se salven. Pero los hombres tienen el gran don del libre albedrío, y el ejercicio de ese don para buscar y encontrar este Amor parece ser una dificultad que impedirá que la gran mayoría de la raza humana reciba esta gran bendición redentora.

Mi Padre no desea que ningún hombre viva eternamente sin este Amor; pero llegará el día, y muy pronto, en que el privilegio de obtenerlo le será retirado a la humanidad; y cuando ese gran acontecimiento ocurra, nunca más se restaurará el privilegio; y los hombres que entonces carezcan de Él se verán obligados a vivir eternamente con el único consuelo de su amor natural y a obtener la felicidad que puedan obtener de él. Los hombres pueden pensar que este tiempo de separación nunca llegará, pero se equivocan, y cuando sea demasiado tarde, se darán cuenta.

La armonía del universo de mi Padre no depende de que todos los hombres reciban este Amor Divino, porque mediante las operaciones de las leyes de Dios de la armonía en las almas humanas, todo pecado y error serán erradicados, y solo permanecerá la verdad; pero la mera ausencia de pecado no significa que toda la creación de Dios vaya a estar poblada por espíritus y hombres igualmente felices, o llenos del mismo tipo de amor. El hombre libre de pecado y con solo su amor natural, estará en perfecta armonía con otros hombres que posean el mismo tipo de amor; pero no estará en armonía con aquellos espíritus que poseen este Amor Divino y la suprema felicidad que Éste otorga. Y, sin embargo, tales diferencias en amor y felicidad no crearán discordia ni carencia de armonía en el universo.

Adán y Eva, o a quienes ellos personifican, no tenían este Amor Celestial, sino solamente el amor natural que correspondía a su creación como seres humanos, y, aun así, eran comparativamente felices; pero su felicidad no era como la de los ángeles que viven en los Ámbitos Celestiales donde solo existe este Amor Divino de Dios. Eran mortales, y cuando la tentación los asaltó, el amor que poseían no pudo resistirla, y sucumbieron. Así pues, aunque el hombre pueda vivir eternamente y estar libre de pecado y error, siempre estará sujeto a tentaciones que este amor natural tal vez no pueda resistir. Es decir, su naturaleza será simplemente la naturaleza que tenían Adán y Eva, ni mayor ni menor.

Incluso en esa condición, podrá resistir todas las tentaciones que lo asalten, pero siempre estará sujeto a perder su felicidad y, por lo tanto, a ser más o menos infeliz. Este es el futuro de los hombres que no han recibido el Amor Divino.

Pero aquel espíritu que posee este Amor Divino se convierte, por así decirlo, en parte de la Divinidad misma, y ​​nunca estará sujeto a la tentación ni a la infelicidad. Estará libre de todo poder que pueda conducirlo a la infelicidad, como si fuera un verdadero Dios. Es decir, su Divinidad no le puede ser arrebatada por ningún poder, influencia o instrumento en todo el universo de Dios.

Este amor convierte al hombre mortal y pecador en un espíritu inmortal e inmaculado, destinado a vivir por toda la eternidad en la presencia y en unidad con el Padre.

Así pues, si tan solo los hombres pensaran y comprendieran la importancia de obtener este Amor Divino, no serían tan descuidados en sus pensamientos y aspiraciones respecto a las cosas que determinarán su estado futuro por toda la eternidad.

Estas verdades son tan importantes que nunca se podría insistir demasiado a la hora de que los hombres las consideren; y, cuando llegue el momento de su partida, cuanto más las hayan meditado y cuanto más hayan adquirido conocimiento de ellas, mejor será su condición en el mundo espiritual. El mundo espiritual no les ayudará mucho a obtener una visión más profunda de estos asuntos espirituales, pues en dicho mundo los hombres difieren y tienen sus opiniones, igual que en la tierra.

Por supuesto, en él no tienen todas las tentaciones para complacer sus pasiones y apetitos como las que sí tenían en la carne; pero en cuanto a su opinión sobre las cosas espirituales, las oportunidades no son mucho mayores, salvo que, al estar libres de las pasiones e influencias de la carne, pueden dirigir sus pensamientos hacia cosas más elevadas y, de esta manera, comprender más pronto que solo este Nuevo Nacimiento en el Amor de lo Divino puede salvarlos por completo de las consecuencias naturales que se derivan de la posesión exclusiva del amor natural.

Un espíritu es solo un hombre sin un cuerpo terrenal y sin las preocupaciones que necesariamente corresponden a las obligaciones de los lazos terrenales. Pero incluso como espíritus, algunos conservan estas preocupaciones durante mucho tiempo después de venir, y luego se liberan de ellas al pagar las penalizaciones correspondientes a la ley violada.

Bueno, he escrito mucho y debo detenerme. Así que, con mis bendiciones y amor, te deseo buenas noches.
Tu espíritu compañero,
Jesús

Habla de su gran felicidad en su progreso (Helen – Sra. Pagdett, Espíritu celestial) (3 marzo 1915)

Estoy aquí, Helen.

Bueno, ¿no fue ese un maravilloso mensaje del Maestro? Estaba lleno de cosas que deberían hacer que los hombres reflexionen y se esfuercen por alcanzar este Amor Divino del que hablaba.

Me alegra decir que ahora lo poseo en gran medida, y cuanto más lo consigo, más feliz soy. Creía ser feliz al entrar en la tercera esfera, y más aún en la quinta, y luego supremamente feliz en la séptima; pero, en realidad, no sabía lo que era la felicidad hasta que llegué a mi hogar actual en los Ámbitos Celestiales; y supongo que, a medida que ascienda, la felicidad de cada esfera progresiva será mucho mayor que aquella desde la cual progresé.

Pero, por supuesto, el Maestro ha sido el Gran Instructor, en cuyo amor y poder me ha ayudado más que todos los demás. Es tan maravilloso en amor y sabiduría que casi lo adoro, aunque dice que debo adorar solo a Dios, y sigo sus instrucciones.

Mis experiencias aquí son tan maravillosas que apenas me doy cuenta de lo que significan. Mi tiempo en el mundo espiritual ha sido tan breve, y sin embargo, el maravilloso conocimiento de las verdades espirituales y la gran felicidad que he recibido me hacen preguntarme con asombro cómo pueden existir tales cosas.

Has escrito mucho esta noche, y creo que será mejor que pare.
Buenas noches. Tu querida esposa,
Helen

Versión en inglés

God is a God of Love, and No Man Can Come to Him, Unless He Receives the Love of the Father in His Soul. The Time Will Come When the Privilege of Obtaining the Divine Love Will be Withdrawn From Mankind, and When That Great Event Takes Place, Never Afterwards Will the Privilege be Restored (Jesus) (3 Mar 1915)

I AM HERE. Jesus.

You are in a better condition to-night and I will continue my messages.

«God is a God of love, and no man can come to Him, unless he receives the Love of the Father in his soul.» As men are by nature sinful and inclined to error and the violation of God’s laws, they can be redeemed from that sin only by obtaining this Love; and that can be obtained only through prayer and faith in the willingness of God to bestow this Love upon whomsoever may ask for it. I do not mean that there must be formal prayers or compliance with any church creeds or dogmas; but the prayer that is efficacious is that which emanates from the soul and earnest aspirations of a man. So let men know, that unless they have the real soul longings for this Love, it will not be given to them – no mere intellectual desires will suffice. The intellect is not that faculty in man that unites him to God. Only the soul is made in the likeness of the Father, and unless this likeness is perfected by a filling of the soul with the Divine Love of the Father, the likeness is never complete.

Love is the one great thing in God’s economy of real existence. Without it, all would be chaos and unhappiness; but where It exists, harmony and happiness also exists. This I say, because I know from personal experience that it is true. Let not men think that God is a God who wants the worship of men with the mere intellectual faculties, that is not true. His Love is the one thing that can possibly unite Him and them. This Love is not the Love that is a part of man’s natural existence; the love that men have, who have not received a part of the Divine Love, is not sufficient to make them one with the Father; nor is that love the kind that will enable them to enter the Celestial Spheres and become as the Angels who are filled with this Divine Love, and who do always the Will of the Father. This Love is found only in the souls of those who have received it through the ministrations of the Holy Spirit – the only instrument of God’s workings, that is used in bringing about the salvation of men.

I have seen the operations of the Spirit upon the souls of men, and know what I tell you to be true. No man must rest in the assurance that any other instrumentality or medium than the Holy Spirit, will enable him to obtain this Love. He must not rest in the thought that without this he can become a part of God’s Kingdom, for no love but this Divine Love can entitle and qualify him to enter that Kingdom.

When on earth I taught the doctrine of salvation only through the workings of the Holy Spirit in fulfilling the commandments of the Father. Mere belief in me or in my name without this Love, will never enable any man to become the possessor of this Love. Hence the saying, » that all sins against me or even against God’s commandments may be forgiven men, but the sin against the Holy Spirit will not be forgiven them, neither while on earth nor when in the spirit world.» This means that so long as a man rejects the influences of the Spirit he sins against it, and such sin prevents him from receiving this Divine Love; and hence, in that state he cannot possibly be forgiven, and be permitted to enter into the Celestial Kingdom of the Father.

God’s Love is not that which needs the love of man to give it a Divine Essence, but on the contrary, the love of man in order to become Divine in its nature, must be completely enveloped in or absorbed by the Divine Love of the Father. So, let man know that his love is but the mere shadow of what the Father’s Love is, and that so long as he refuses to receive this Love of the Father, he will be compelled to remain apart from the Father, and enjoy only the happiness which his natural love affords him.

I am so certain that all men may receive this Love, if they will only seek for it in the true way and with earnest desire and faith, that I know it is possible for all men to be saved. But men have the great gift of free will, and the exercise of that gift towards the seeking and finding of this Love seems to be a difficulty that will prevent a large majority of the human race from receiving this great redemptive boon.

My Father is not desirous that any man should live through all eternity without this Love; but the time will come, and very soon, when the privilege of obtaining this Love will be withdrawn from mankind; and when that great event takes place, never afterwards will the privilege be restored; and men who are then without It will be compelled to live through all eternity with only their natural love to comfort them and get whatever happiness they may be able to obtain from such love. Men may think that this time of separation will never come, but in that they are mistaken, and when too late, they will realize it.

The harmony of my Father’s universe is not depending on all men receiving this Divine Love because in the workings of God’s laws of harmony on men’s souls all sin and error will be eradicated, and only truth will remain; but the mere absence of sin does not mean that all parts of God’s creation will be peopled by spirits and men who are equally happy, or who are filled with the same kind of love. The man who is free from sin and has only his natural love, will be in perfect harmony with other men possessing the same kind of love; but he will not be in harmony with those spirits who have this Divine Love and the supreme happiness which It gives. And yet, such differences in love and happiness will not create discord or want of harmony in the universe.

Adam and Eve, or whom they personify, had not this Celestial Love – only the natural love that belonged to their creation as human beings, and yet, they were comparatively happy; but their happiness was not like that of the angels who live in the Celestial Heavens where only this Divine Love of God exists. They were mortals, and when temptation came to them, the love that they possessed was not able to resist it, and they succumbed. So, even though man may hereafter live forever and be free from sin and error, yet, he will always be subject to temptations which this natural love may not be able to resist. I mean that his nature will be merely the nature that Adam and Eve had -nothing greater or less.

Even in that condition he may be able to resist all temptations that may assail him, yet, he will always be subject to fall from his state of happiness, and so become more or less unhappy. This is the future of men who have not received the Divine Love.

But the spirit who has this Divine Love becomes, as it were, a part of Divinity Itself, and will never be subject to temptation or unhappiness. He will be free from all powers that may possibly exist for leading him to unhappiness – as if he were a very God. I mean that His Divinity cannot possibly be taken from him by any power or influence or instrumentality in all the universe of God.

This love makes a mortal and sinful man an Immortal and sinless spirit, destined to live through all eternity in the presence of and at one with the Father.

So, if men would only think and realize the importance of obtaining this Divine Love, they would not be so careless in their thoughts and aspirations concerning those things which will determine their future state through all eternity.

The importance of these truths cannot be too forcibly placed before men for their consideration; and, when the time comes for them to pass over, the more they have pondered on and obtained a knowledge of these truths, the better will be their condition in the spirit world. The spirit world will not help them so very much to obtain a more enlightened insight into these spiritual matters, because in this world men differ and have their opinions just as on earth.

Of course, they have not all the temptations to indulge their passions and appetites, which they had when in the flesh; but as regards their opinion of spiritual things, the opportunities are not very much greater, except in this, that because of the freedom from the passions and influences of the flesh, they may sooner turn their thoughts to higher things, and in this way sooner realize that only this New Birth in Love of the Divine can save them entirely from the natural results that follow the possession of only the natural love.

A spirit is only a man without an earthly body, and the cares that necessarily belong to the obligations of earth ties. Even as a spirit, some retain these cares for a long time after coming over, and then are relieved of them by paying the penalties of a violated law.

Well, I have written long and must stop. So I say with my blessings and love, good-night.
Your fellow spirit,
JESUS.

Tells of Her Great Happiness in Her Progress (Helen – Mrs. Pagdett, Celestial Spirit) (3 Mar 1915)

I AM HERE. Helen.

Well, was not that a wonderful message of the Master? It was so full of things that should make men think and work to get this Divine Love that he spoke of.

I am happy to say that I have it now to a considerable degree, and the more I get of it the happier I am. I thought that I was happy when I entered the third sphere, and more so in the fifth, and then supremely so in the seventh, but, really, I did not know what happiness was, until I got into my present home in the Celestial Heavens; and I suppose as I go higher, the happiness of each succeeding progressive sphere will be so much greater than that from which I progressed.

But, of course, the Master has been the Great Teacher, whose love and power have helped me more than all the others. He is so wonderful in love and wisdom that I almost adore him, although, he says that I must worship only God, and I follow his directions.

My experiences here are so wonderful that I hardly realize what it all means. My time in the spirit world has been so short, and yet, the wonderful knowledge of spiritual truths and the great happiness that I have received, cause me to wonder in amazement that such things could be.

You have had a long writing to-night, and I think I had better stop.
So good-night. Your loving wife,
HELEN

 

Un repaso «espiritual» ─y algo geopolítico :)

Tenemos resistencia a la verdad:

─ o bien resistencia en cuanto a «demostrarse uno mismo» a ver si es así de simple,

─ o bien a la hora de «practicarla» realmente.

Los espíritus (desencarnados) que tenemos alrededor a menudo nos tapan a la hora de oír o entender cosas simples acerca del alma ─cosas personales y universales─.

Los espíritus que solemos tener pegados ─a veces durante muchos años─ son a menudo nuestros propios familiares. Y es que, claro está, resonamos muy fuertemente con sus heridas… y con las ganas, más o menos compartidas, de no sentir las heridas emocionales, el dolor de la compensación negativa, etc.

No por nada es que nuestros adultos acompañantes son quienes nos han pasado las heridas emocionales más básicas, y la forma de hacer fachada frente a ellas, para no sentir tales heridas.

Así que, al fin y al cabo, a «nuestros adultos» les dolerán las cosas de manera similar.

Y, en general, tal como nos sucede a todos ─por ahora─, parece que suelen pasar muchos años antes de que sintamos verdaderos deseos de arrepentirnos y de perdonar nuestras cosas.

Imaginemos los apegos que sigue habiendo a las cosas materiales y a sus efectos sobre nosotros (los efectos «adictivos»), si en el fondo la muerte física no cambia nada en nuestro ánimo.

En «el otro lado» seguimos apegados a no sentir ciertas cosas, y a sí sentir ciertas otras: como pueden ser los efectos emocionales, es decir, los efectos que tienen o tenían en nuestra alma las adicciones a la comida, al alcohol, las drogas, el poder, la violencia, el sexo, el dinero, etc. Continuar leyendo «Un repaso «espiritual» ─y algo geopolítico :)»

La polémica sobre el curso de milagros y la CIA :)

Hay una especie de «batalla por el alma humana».

Hay una polémica en torno al curso de milagros y la CIA 🙂

Y sí, UCDM sí es una especie de distorsión y suplantación en torno a estos asuntos cruciales que son Dios, y lo que sucedió y sucede con Jesús ─independientemente de que llamemos o consideremos a los agentes de tal distorsión como «la CIA» 🙂 , etc.─.

(Y no lo digo desde una posible posición fanática… donde defendería por ejemplo una religión cualquiera… o algún dogma o algún tipo de cristianismo, por ejemplo. También, tal como mucha gente sabe o intuye, sucede que la Biblia se usa distorsionadamente… aparte de que contiene muchas imprecisiones, etc.)

Parece ser crucial, entonces, controlar ─desde el mundo espiritual, en esa especie de «batalla por el alma humana»─ los discursos alternativos y posiblemente «mejores» que lo escrito en la Biblia… y que son posibles palabras de Jesús o sus interpretaciones. Continuar leyendo «La polémica sobre el curso de milagros y la CIA :)»

Un testimonio sobre el infierno como experiencia cercana a la muerte y las «manipulaciones cristianas»

Una captura de un momento del vídeo del que hablamos

En este audio…

enlace en ivoox // enlace descarga

… comento y narro con detalles el testimonio de la experiencia de Dominic Morrow, que aparece en el siguiente vídeo-podcast en youtube, en un canal llamado «Know Christ»:

https://www.youtube.com/watch?v=hV0SmcxLJoY
«I Was Dead For 3:47 Secs & Went to Hell. It Felt Like I Was There For Months! | Dominic Morrow»

Esa experiencia la tuvo Dominic tras sufrir disparos, ya que él estaba «en la mala vida»: era un criminal traficante, en una banda en los EEUU…

La experiencia consiste en vivencias muy intensas de oscuridad y luego algo violentas, tenidas en su cuerpo espiritual (que él reconoce como tal).

Una vez conocemos estas verdades básicas que tratamos en la web, al hilo de lo que vemos con Jesús y María Magdalena, es fácil sentir o empezar a sentir verdades sobre la manipulación que se da en torno a estas experiencias cercanas a la muerte (ECM), ya sean experiencias «de luz» o «de oscuridad».

Es decir, Jesús mismo nos contó que por ejemplo los exorcismos (al parecer casi todos) serían experiencias artificiales, es decir, experiencias en gran medida artificiosamente creadas o concebidas parcial o totalmente desde el mundo espiritual, para demostrar dogmas ─los dogmas que siguen determinados grupos y religiones─.

Uno de tales dogmas, que nos atañe en este caso, es el de que existe «un demonio», o sea un «jefe del mal»… cuando en realidad hay muchos «demonios» (como ya saben también «los cristianos»), pero que son personas, almas como nosotros… y no «ángeles caídos» que hubieran sido creados directamente por Dios, etc.

En el testimonio de Dominic vemos algunas verdades esenciales mezcladas con cosas no tan verdaderas… y sobre todo, vemos las pistas que nos indican que en parte estaría pasando lo mismo que con esos exorcismos de los que Jesús comenta que sobre todo se usan para intentar «convencer de dogmas».

Es decir, aunque sea una experiencia real, donde Dominic habría vivido en su cuerpo espíritu cosas muy relevantes que reflejaban su condición álmica, la experiencia podría haber sido en parte concebida o tratada después como algo a poner al servicio (mientras Dominic se deje) para fomentar ciertas «ideas cristianas» ─tal como las conciban los determinados grupos de desencarnados que vayan siendo guías de Dominic y sus grupos─.

La experiencia contendría al final rasgos de manipulación más o menos condescendiente, ya que normalmente nuestra condición de alma habilta eso mismo; es decir, nuestra condición álmica es la de querer ser más o menos manipulados y manipulables, a imagen de esa «actitud profunda» que aprendimos a tener en el hogar, con las emociones de nuestros tutores, padres, madres, etc.

En este testimonio vemos asomarse ciertos dogmas, pero lógicamente también contiene verdades maravillosas, así como «avances» evidentes hacia verdades que a veces echamos en falta en muchos grupos religiosos o mundos de la «espiritualidad».

 

1/5:1-2) 5. El Espíritu Santo (primeros mensajes) | El verdadero evangelio – Revelado de nuevo por Jesús | Vol. 1. / 5:1-2

Índice
─ Introducción y enlace al audio
─ Versión en español
─ Versión en inglés 

___

 

Introducción

─ Enlace al audio: en ivoox // enlace descarga

A continuación vamos a ver parte del apartado:

5) El Espíritu Santo

Vemos los dos primeros mensajes contenidos en el tema 5.

El tema es el «Espíritu Santo», y vemos por ejemplo la distinción esencial entre «Espíritu de Dios» y «Espíritu Santo».

Para ver la lista con todos los enlaces a los textos y audios ver:

unplandivino.net/transicion/

Forma parte de un libro que es el primer volumen de los mensajes recibidos a principios del siglo XX por James E. Padgett de parte de varios desencarnados, entre otros, Jesús de Nazaret.

Estos volúmenes fueron preparados o compartidos así por Divine Truth (entre otras personas).

El primer volumen incluye los siguientes temas y apartados (los 11 temas numerados sirven para organizar temáticamente los mensajes):

a) ─ Retrato de James E. Padgett
b) ─ Mi testimonio (por Leslie R. Stone)
c) ─ Foto espiritual de Mary Kennedy con su alma gemela, el Dr. Stone.

           d) ─ La verdadera misión de Jesús

I. Jesús y su relación con Dios.
II. Dios y el alma humana.
III. El problema del pecado.
IV. Redención del pecado.

─ 1. Los mensajes
─ 2. Ámbitos celestiales
La oración
─ 3. Inmortalidad
─ 4. ¿Quién y qué es Dios?
─ 5. Espíritu Santo [estamos aquí: Vemos los primeros dos mensajes en este apartado 5]
─ 6. Resurrección
─ 7. El alma
─ 8. Perdón
─ 9. Expiación
─ 10. Infierno
─ 11. Expiación vicaria
e) ─ Mensajes adicionales

Versión en español
5. El Espíritu Santo

Muchos que creen haber recibido el bautismo del Espiritu Santo sólo han avanzado en el amor natural y no en el Amor Divino. Diferencia entre el Espíritu de Dios y el Espíritu Santo (Jesús) (10 mayo 1920)

Permíteme escribir brevemente sobre un tema que será de interés para ti y para quienes lean mis mensajes.

De lo que deseo escribir esta noche es acerca de la condición de aquellos que piensan que han recibido el influjo o bautismo del Espíritu Santo, cuando el hecho es que sólo han recibido el avance en la purificación de su amor natural y una armonía con las leyes de su creación, lo cual les hace creer que lo que experimentan debe ser el resultado de un otorgamiento del Amor que el Espíritu Santo trae a los mortales. En este error caen muchos humanos; y en la satisfacción, o más bien felicidad, que les produce su experiencia, derivada de tal aumento de la armonía, creen plenamente que es el Espíritu Santo lo que ha tomado posesión de sus almas y ha causado la felicidad. Pero al llegar a esta conclusión se engañan a sí mismos, y cuando lleguen a un despertar en la vida espiritual se van a dar cuenta de su error. Continuar leyendo «1/5:1-2) 5. El Espíritu Santo (primeros mensajes) | El verdadero evangelio – Revelado de nuevo por Jesús | Vol. 1. / 5:1-2»

¿Nuestra época «anti-Dios»? Algunas cosas básicas sobre la actitud de «no poner primero a Dios», servida por un montón de cosas

¡Hola! Esta es otra entrada a modo de saludo (es un comentario general, realizado en este vídeo del célebre «cura de Toledo» 🙂 ).

Las personas, en algunas religiones, se quejan a veces de que cosas como el yoga son «anticrísticas», y aunque todo esto lo hemos tratado ya ─en estos años atrás desde fines del 2020─, y se nos ha aclarado completamente esta cuestión, veamos un repaso aquí.

Ciertamente usamos técnicas, incluso las «espirituales», para «no poner primero a Dios» en nuestras vidas, y así, justificamos determinadas fachadas (es decir: justificamos formas de evitar sentir humildemente nuestro daño (miedos, etc.), el daño o heridas que tenemos en el alma, y en cuya justificación nos impedimos realmente ser nuestro «yo real», y por tanto, una relación con Dios, ya que «Dios solo se puede relacionar con nuestro yo real» ─que es algo que vimos expresado así, literalmente, en las enseñanzas que estamos viendo─).

El tema es ir sintiendo cómo las técnicas y actitudes espirituales, que en sí mismas serían «meros medios», se unen entre sí en estos tiempos.

Es decir, por ejemplo, tenemos la actitud de cierta «independencia» más o menos arrogante: con la inteligencia artificial parece poder darse una especie de colofón de autoendiosamiento potencial.

Varios elementos, de fuentes diversas, pueden reunirse, «hacer mundo», como conjunto de cosas para consolidar cierto «espíritu», cierta actitud, junto a cualquier técnica espiritual o religiosa. Continuar leyendo «¿Nuestra época «anti-Dios»? Algunas cosas básicas sobre la actitud de «no poner primero a Dios», servida por un montón de cosas»

El ejemplo de Rubén Gisbert como declaración de una cierta fe concreta (en cuanto al tratamiento de la verdad en política y en la propia vida)

Captura de un momento en que Rubén entra en una residencia de ancianos inundada. Es del vídeo en directo hecho por Rubén el día 31 de octubre del 2024, un día después de la inundación por la DANA en poblaciones valencianas y españolas

Al hilo de lo que estamos viendo últimamente por ejemplo en «Desmitificando de nuevo la fe«:
unplandivino.net/desmitificando-de-nuevo-la-fe/,
… podemos ver un caso concreto de persona que hace declaraciones de fe muy nítidas: Rubén Gisbert, que precisamente ha sido masivamente difamado a finales de este año 2024, pues, como sabemos, en el mundo estamos básicamente en emociones contrarias a la verdad (en miedo y en las creencias asociadas al miedo), y el error lucha contra la verdad «como gato panzarriba», dentro de nosotros.

Rubén hace declaraciones de fe muy manifiestas, independientemente de lo «pura» o impura  que esta fe pueda ser.

La fe no es algo religioso. La fe es la actitud de algo así como una fidelidad a «la verdad interna», que también muestran los científicos, pues la fe se basa en hechos, aunque sean hechos de la certeza sentida internamente (lo que tradicionalmente se llama «conciencia», que es la voz de los sentimientos de la conciencia ─no «consciencia» con ese, sino «conciencia»─).

La fe es como una fidelidad a algo que sabemos que es verdad ahora, y que es algo que deseamos sinceramente para nosotros que sea verdad ahora y en el futuro.

La fe puede estar más o menos impura, en cuanto a que lo que cultiva esa fe sea más o menos fiel a la verdad… pero el fenómeno es el mismo.

La declaración que Rubén Gisbert hace a menudo, es la de «hacer lo que siente que debe hacer», una declaración de lealtad, para poder «morir tranquilo», pudiendo entonces mirar atrás sintiendo cierta paz en ese día de la muerte ─y en general poder mirarse al espejo en el presente, todos los días─.

Y Rubén claramente expresa, por cierto, que ni siquiera cree en la vida más allá de la muerte, y, por tanto, mucho menos «cree en Dios», aunque él y muchas personas asocian de manera irracional y extraña ambas cosas, es decir: la vida tras la muerte, y Dios ─como si fueran indisociables─).

Pero el tema no es ese, porque insistamos, la fe no es algo religioso.

Rubén lo expresa a menudo usando la palabra «deber», en relación a esa especie de «llamada interna» que todo el mundo de algún modo sentimos, y que tiene que ver con un cierto «ser fieles a la verdad y a uno mismo».

Rubén da uno de los mejores ejemplos que he visto nunca de declaración de fe.

Quizá ese tipo concreto de expresión le viene de familia (la expresión del «deber»), y, por cierto, quizá en su familia él tuvo una experiencia algo mejor que la promedio, en cuanto a que su padre y/o su madre puede que fueran más «éticos» que el promedio, en el sentido de que «mantuvieran su palabra» con él, aunque él «sólo fuera un niño».

Esto de ser coherentes con los niños no suele pasar a menudo, por lo que parece, ya que de pequeños todos somos traicionados casi todo el rato con displicencia condescendiente.

Es decir, por ejemplo no se cumplen las promesas hechas a los niños. Con ellos se justifica ser incoherentes. Incoherentes por ejemplo en la enseñanza de lo que se llama «valores», una enseñanza esta que suele ser «inconsciente» y que en general creo que todavía no se tiene como algo realmente importante o primordial, y que ─digamos─ es dada «por el ejemplo», un ejemplo que muchas veces es malo ─es decir, está en desarmonía con la verdad y con el amor─.

 

Jesús charla con espíritus «Nueva Era» (Arvanna y «su» grupo)

En este vídeo…
…Enlaces:
─ YT:
https://www.youtube.com/watch?v=wF778CruU78─ Para descargar:
https://www.dropbox.com/scl/fi/liyp6lag08xxzyjmkagx8/20241012-Jesus-charla-con-espiritus-Nueva-Era.mp4

… comento y traduzco parte del vídeo* donde vemos a María Magdalena canalizar ─a finales de octubre del 2024─ a una mujer desencarnada que en ese momento estaba en la cuarta esfera, y que «murió» hace algunos miles de años.

La espíritu charla con Jesús, a través de María, sobre algunas cosas básicas en torno al progreso en el mundo espiritual, la influencia sobre la Tierra, etc.

__
* Vídeo original
(vemos la canalización completa, la primera del día, y que va desde el minuto 12 +o- hasta el 47.30 del vídeo original):
https://www.youtube.com/watch?v=Qzcdtm0-IM4
20241025 1400 DT Living Room Tour US event 12 Day1 Part2

 

Con aparatos («científicamente») ya se demostró la existencia de los desencarnados

– Conferencia sobre psicoimágenes (Sinesio Darnell):
https://www.youtube.com/watch?v=bX0CTOAlxhc

En esa conferencia habla Sinesio ─una persona que se ve muy sensata y seria─.
Nos cuenta interesantes casos, pues en Europa se hicieron incluso demostraciones públicas por TV de lo que podemos llamar «mediumnidad» comprobada científicamente, o sea, con aparatos, con pruebas visibles que perduran en el tiempo

(con «mediumnidad» me refiero, claro está, a actos de «mediación» con espíritus, es decir, con desencarnados. En esas experiencias se empleaba la tecnología de la época (televisión, vídeo, etc.), para contactar muy claramente con desencarnados, e incluso delante de bastante público y por TV).

En ese mismo canal de youtube se pueden ver programas* del año 1989, 1990, etc., de la TV española, que muestran actitudes y opiniones muy abiertas, variadas, tranquilas e interesantes… en debates sobre «la vida tras la vida», ovni’s, etc.

Como hemos visto ya, con la divulgación de la verdad divina que hemos tratado durante estos años en esta web y canal UnPlanDivino ─desde finales del 2020─, podemos entender y discernir de forma muy coherente entre las opiniones que podamos ver en estos vídeos tan buenos de hace más de 30 años… que tratan acerca de fenómenos que ahora en general ya sabemos que tienen que ver con que «nadie muere» (tampoco los abortos, por ejemplo), y que en el enorme mundo espiritual ─con sus dimensiones─ hay todo tipo de actitudes, condiciones, etc.

La actitud de Sinesio queda reflejada en esta cita de un blog donde se recopilan menciones a su obra, etc.:

Tengo que decir que Sinesio era un oasis en mitad de una multitud de personas que trataban el tema paranormal de forma frívola o simplemente buscando emociones primarias.

* Enlaces de algunos de esos programas (en el canal llamado «Moisés Garrido y Claudia M. Moctezuma«):
https://youtu.be/pzuvGQwg_PM?si=VXe_XfURDl3b_qWK
https://youtu.be/BkHgaM_Kxoc?si=SBnrozWKkaYo0Ltc