En esta conversación* de este vídeo vemos de forma pausada, relajada, una «noticia» reciente en España, pues algunos políticos tristemente célebres aquí, políticos «falsos»… han usado la palabra «conciencia» (que es el «órgano» de la verdad de Dios en el alma).
Conversamos sobre esto debido en parte a que hace poco hice este audio leyendo a Simone Weil sobre cómo el espíritu de partido corrompe nuestra alma, o indica la corrupción de nuestra alma:
– https://go.ivoox.com/rf/81405633
– Entrada web donde lo presento
Vemos que estas estructuras falsamente políticas (que sirven al conflicto, al miedo y a la ignorancia) sirven para desconectarse de la conciencia, de ese «órgano» en el alma que nos permite sentir la verdad y, en su caso, actuar en consecuencia.
Por ejemplo, la conciencia es el sentir la certeza en el alma de que matar a otro está mal (es decir, es degradante para el alma del asesino y del asesinado).
La conciencia sería el mismo «órgano» o fenómeno de base álmica para todo lo que tiene que ver con «sentir certeza», profundamente.
Y de la verdad depende la justicia, el bien…
Los falsos políticos dan mal ejemplo a toda la sociedad… y, como vimos en los materiales de la verdad divina, es absurdo que la responsabilidad corresponda a quienes quieren traicionar a su conciencia (y esa desarmonía es corregida todo el rato por las leyes verdaderamente «naturales»).
En realidad, estructuralmente parece que «falsos políticos» son casi todos, pues tenemos la costumbre (venenosa) de que los políticos «tienen que renunciar» a ser «veraces».
Ya vimos (aquí por ejemplo) cómo nos contaba Jesús, Miller, esto tan simple de que en realidad todo lo falso crea miedo, y el miedo dolor (físico y emocional).
Por eso la verdad libera y nos abre a más amor.
La responsabilidad, los roles, las funciones… en la vida, nos llegan a menudo de forma casi natural, debido a nuestro coraje para afrontar nuestros miedos —sintiéndolos como los niños pequeños—, y debido a nuestra condición en amor y verdad, en el alma.
Es degradante que el «espíritu de partido» regule las asociaciones en torno al bien público —si queremos crecer en el alma—.
Ese espíritu envenena y crea el miedo y el caos del que se aprovechaban siempre las oligarquías corruptas, las oligarquías que idolatran algún medio (estados, o «estado-nación», dinero, etc.), anteponiendo los medios los a fines universales que sentimos en la conciencia.
Al menos es bueno que en este suceso (una tertulia deprimente**) hayan mentado el nombre, «conciencia»… y que se pongan a «agachar» la cabeza reconociendo que en el fondo el funcionamiento de casi todo esto es indigno.
Así que, como decíamos, se da mal ejemplo a todo el mundo, pues renunciar a la conciencia, a sentir la verdad, es la base de este caos artificial.
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** Enlaces o nombres de las cosas vistas:
Rubén Gisbert es una de las personas que llamaba la atención sobre la tertulia comentada:
https://www.instagram.com/ruben.gisbert/
La «tertulia» que vemos es «El Ágora de Hora 25 (07/02/2022)», que se puede encontrar en plataformas como youtube e ivoox.